Por Redacción - 7 Noviembre 2024
La consultora BTS y CIONET, han presentado en Vodafone Lab Madrid, este 6 de noviembre, su estudio sobre transformación digital en España en el que han participado, mediante entrevistas en profundidad, los CIOs, CDOs, CISOs y Directores de Transformación de 15 de las mayores empresas del país.
Entre las principales conclusiones destaca cómo los responsables tecnológicos valoran positivamente, 7,10 sobre 10, su capacidad para evangelizar y promover la transformación digital dentro de la organización. “Esto resulta muy importante, ya que una de las principales barreras para avanzar en el proceso de transformación son las resistencias culturales, incluidas, por supuesto, las de los equipos directivos, que no llegan a ponderar adecuadamente su relevancia”, ha explicado Iván Martín Bermejo, Tech Talent Consulting, Senior Director en BTS.
No obstante, la afirmación "el comité de dirección comprende la importancia de la tecnología de manera sólida y actúa en consecuencia" ha recibido una nota promedio de 7,60 sobre 10. Esta evaluación refleja una percepción mayoritariamente positiva, aunque no exenta de matices. En términos generales, el comité de dirección demuestra una comprensión razonable de la importancia de la tecnología, especialmente en áreas críticas como los datos o la ciberseguridad. De hecho, en este ámbito específico, la puntuación se elevaría a un 8 o 9 sobre 10 no solo por su criticidad sino también por un alto nivel de comprensión.
España avanza en transformación digital, con puntos de mejora
De esta forma, el estudio titulado “Madurez digital: situación actual y capacidad futura para abordar procesos de transformación complejos”, analiza en profundidad el estado actual de la madurez digital y tecnológica dentro de las organizaciones, poniendo el foco en sus capacidades actuales para afrontar este tipo de transformaciones complejas y señala cómo este tipo de cambios estructurales son impulsados y afectados por las personas.
Para lograr una imagen completa de la situación, el estudio analiza diferentes cuestiones que afectan a las organizaciones en este ámbito: la gestión y liderazgo en la transformación; la mentalidad digital y las nuevas formas de trabajo; la madurez digital y el seguimiento del cambio y cómo todo esto se alinea con la estrategia.
La investigación apunta a que, en España, la transformación digital se encuentra en una etapa de desarrollo significativo, presentando avances notables, pero también áreas de mejora. El país mantiene una posición razonablemente sólida en cuanto a la adopción tecnológica en comparación con otros países, especialmente en sectores como la banca y las utilities. El sector bancario destaca particularmente en áreas como medios de pago y transacciones. Asimismo, en campos como la ciberseguridad y la automatización de procesos, España muestra un nivel comparativamente más avanzado que países de su entorno. Otros países vecinos, como Suiza, están más avanzados en ciertos aspectos de medición, valor y ejecución de proyectos.
“La pandemia jugó un papel crucial como catalizador de la digitalización. Obligó a las organizaciones a adaptarse rápidamente a un nuevo escenario. Este proceso acelerado mejoró la relación entre empresas y sus colaboradores en materia de tecnología. De hecho, existe una percepción generalizada de que los principales proveedores nacionales están a la altura de los internacionales, Sin embargo, el estudio señala también la necesidad de fortalecer aún más la relación y el entendimiento entre las empresas contratantes de tecnología y sus proveedores para alcanzar los objetivos de negocio de manera más efectiva. Además, también afrontan desafíos comunes, como la escasez de talento sénior y la alta rotación, lo que puede impactar negativamente en los proyectos de transformación digital”, ha explicado Martín Bermejo.
Aprendizajes para el futuro cercano
Fruto de las diversas conversaciones con los líderes digitales se han extraído varias cuestiones clave para que las organizaciones puedan seguir adaptándose a la era digital. En primer lugar, resulta fundamental que la alta dirección comprenda qué se entiende por transformación digital y por digitalización y cuáles son sus beneficios. Los equipos de IT deben tener una representación sólida para garantizar que la transformación digital sea una prioridad.
En segundo lugar, una organización madura digitalmente debe ser co-creadora de la tecnología con las áreas de negocio, lo que significa que deben participar activamente en el desarrollo y la implementación de soluciones basadas en la tecnología. Los roles híbridos, como los Business Relationship Managers, son figuras clave para esto.
“La transformación digital no debe ser solo un proyecto de IT, sino parte integral del plan estratégico de la compañía. La clave para el éxito radica en una comunicación clara, un liderazgo alineado con los objetivos de negocio, y una adopción tecnológica que sea cocreadora de valor. La paciencia, la colaboración y una visión estratégica coherente y consistente son fundamentales para avanzar en este camino y posicionar a España como un referente en la transformación digital a nivel global”, ha concluido Martín Bermejo.